Héctor Sandarti tiene a sus seguidores bastante preocupados luego de publicar un par de fotos desde su cama en el hospital. En ellas, se muestra a sí mismo con la cara vendada, hinchada y llena de moretones en especial alrededor de los ojos. Las imágenes levantaron las alertas entre sus fans quienes de inmediato mostraron su inquietud preguntándole qué había pasado, pues parecía que había sufrido un fuerte accidente.

Para calmar a sus seguidores y alejarse de cualquier especulación, el propio Sandarti habría dado una escueta explicación de su situación actual: “Alguna vez pensé: si algún día me hago una cirugía estética en rostro, sería después de los 50 y algo muy natural. Ese día llegó”.

Si bien algunos podrían considerar que se trataba de un detalle on el que ocultaba lo que en realidad había pasado, el presentador guatemalteco etiquetó a su cirujano plástico para dejar claro que su recuperación se debe a un procedimiento estético.

¿Qué se hizo Héctor Sandarti en la cara?

Aunque no dio más detalles sobre el cambio que podría haberse hecho en la cara, las cicatrices y moretones en los ojos de Sandarti sugieren que pudo haber optado por una blefaroplastia, con la que se quitaría algunos años de encima al eliminar las bolsas o flacidez en el área de los ojos. Además de disimular los signos de la edad, Sandarti tendría una mirada más abierta. Sin embargo, aún debemos esperar a que él mismo confirme lo que se hizo y cuente su propia experiencia tras pasar por el quirófano.

©@hectorsandarti

Así, los fans de Héctor pueden estar tranquilos, y es que muchos opinaban que quizá habría tenido un accidente por un estado de distracción derivado por la profunda tristeza de la pérdida de su madre, Gertie, quien falleció a principios de septiembre.

“Mi madre estaba a 4 días de cumplir 90 años, razón por la cual mis hermanas y yo decidimos juntarnos en Guatemala para celebrar su vida. Y si, tal parece que era lo que ella estaba esperando para irse tranquila y en paz”, anotó aquel triste día en el que se despidió de su mamá.