Niños impulsivos, 'desobedientes' y 'desafiantes' que no entienden de normas sociales
Los niños con TDAH tienen comportamientos que resultan ajenos a las normas sociales, lo que interfiere en su vida familiar, escolar y social.
"Las dificultades para inhibir su conducta, autorregular su comportamiento, controlar sus impulsos y responder satisfactoriamente a las demandas de su entorno" de los menores se traducen, al final, en los siguientes problemas de comportamiento:
- Impulsividad. Reaccionan sin pensar.
- Hiperactividad. No se quedan quietos un momento.
- Desobediencia. Van 'a su aire'.
- Desafiantes, cuestionan y provocan a los otros.
- Ira. El enfado y el malhumor son rutina.
- Agresiones para resolver las limitaciones y frustraciones propias.
Para ellos, la conducta que entendemos como 'correcta', es decir, la socialmente aceptada (no molestar, respetar a los demás... etc), resulta difícil de alcanzar. Un comportamiento problemático que despierta reacciones de incomodidad, malestar, rechazo en las personas, adultos y compañeros, con las que estos niños interactúan.