Con el tul, el layering, o la superposición de prendas, está de tu lado. Y aunque la primavera está que toca la puerta, aún podrás mezclar sweater y blusas con materiales más pesados como el abrigo como muestra la imagen. Sin embargo, las alternativas son muchas. ¡No temas mezclar textiles!
Así que ya lo tienes: el tul, que tantos recuerdos nos trae de la niñez, no tiene límites al momento de combinar colores, volúmenes y otras texturas. Atrévete a probarlo.