Últimamente, el concepto de "vientre de alquiler" o "gestación subrogada" ha tomado mucha fuerza y está en boca de todos. Personalidades como Kim Kardashian, Ricky Martin, Cristiano Ronaldo, Miguel Bosé, Nicole Kidman, entre otros, han optado por este procedimiento para cumplir su anhelado sueño de convertirse en padres. El caso más reciente es el del futbolista colombianoJames Rodríguezy su parejaShannon de Lima, quienes se apoyaron en los avances de la ciencia para tener a su primer hijo en común, Samuel.

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Pero, ¿cómo funciona este método? Esta vía de reproducción se da cuando se fertiliza un óvulo de manera in vitro con un espermatozoide y una vez que se encuentra en su etapa de embrión, es implantado en un útero sano. Sin embargo, el uso de esta técnica ha generado controversia y opiniones divididas. Básicamente, este método de reproducción asistida consiste en alquilar el vientre de una mujer por contrato e inseminarlos con los gametos de otra persona.

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En un principio, esta avance médico era usado con la finalidad de darle la oportunidad de ser padres a aquellas personas que tenían problemas de fertilidad. Desde hace una década, esta opción se ha puesto de moda entre los famosos. Kanye West y Kim Kardashian contrataron a una madre sustituta para concebir a su tercer hijo, Chicago, y en enero de 2019, lo hicieron de nuevo para dar a luz a su cuarto hijo, Psalm.

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Parecido fue el caso del astro portugués, Cristiano Ronaldo, quien en 2017 recurrió a un vientre subrogado en Estados Unidos para traer a sus gemelos.

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Si bien es un enorme beneficio para aquellos que buscan ser padres, otros lo reprochan por considerarlo antinatural, por ello es que las identidades de las madres permanecen, en muchos casos, en el más completo anonimato.

¿Cuándo una persona puede recurrir a este método? Es utilizado cuando el embarazo es médicamente imposible, cuando la madre enfrenta riesgos o cuando un hombre soltero o una pareja del mismo sexo desean ser padres.

Una práctica muy costosa

Este tipo de prácticas es muy costosa y los precios oscilan entre los 60 mil a 120 mil dólares dependiendo del país que se lleva a cabo. Además, la madre cobra entre 80 mil a 150 mil dólares y se le deben garantizar todos los beneficios, incluidos afiliaciones a un seguro médico. Todo esto sin contar los gastos derivados del proceso de embarazo.