

Con la llegada de la nueva estación, llegan también nuevos problemas para la piel. ¿Qué significa esto? Pues que las calefacciones entran en acción y el ambiente estará más seco; que las temperaturas empiezan a bajar y el aire frío nos persigue por todos lados... Por eso tenemos que cambiar nuestra rutina de belleza para compensar la piel seca y la falta de humectación. Aquí te mostramos algunos secretos de la dermatóloga y embajadora de Dove, la Dra. Alicia Barba, para cuidar de tu piel y que se vea hidratada y rejuvenecida, incluso cuando el clima no ayuda.
Una exfoliación intensa o áspera puede eliminar los aceites esenciales de la piel causando brotes o acné en los meses más fríos y secos. Una idea equivocada es que al eliminar diariamente las células muertas de la piel ésta va a mejorar, pero en realidad la piel se está deshidratando.
La piel seca no es solamente molesta, sino que además puede causar problemas en la piel como eczemas, psoriasis o un picor fuerte durante el invierno. Usa un limpiador nutritivo y siempre asegúrate de hidratar la piel después de la limpieza o una exfoliación suave.
La ropa que usamos durante los meses más cálidos nos obliga a prestar atención a la piel que mostramos, pero en el invierno es fácil descuidar estas áreas ya que empezamos a optar por piezas más cubiertas. Uno debe ser diligente en continuar con el cuidado de las áreas del cuello, el pecho, las manos y hasta las axilas. La piel debajo de los brazos es bastante sensible. La textura y tipo de tela en chaquetas, ropa interior y camisetas pueden irritar la piel. Por debajo de todas esas capas de la piel, se necesita un producto que te hidrate y a la misma vez te proteja, como Dove Advanced Care Antiperspirant, que está formulado con humectantes para ayudar aliviar la irritación y dejar tus axilas suaves.
La hora de dormir es el mejor momento para hidratar tu piel. Si estás tratando de disminuir la descomposición del colágeno, considera estos tres pasos antes de dormir: 1. Lava tu cara. 2. Aplica un retinol. 3. Hidrata.