El camaleónico Jared Leto: un 'sube y baja' de peso par el cine

Jared Leto es uno de los actores de Hollywood más comprometidos con su trabajo. Para entrar en sus personajes suele hacer con su cuerpo lo que no todos harían: desde someterse a dietas extremas que afectan su salud, comer en demasía para subir hasta 66 libras, desarollar llamativa musculatura e incluso privarse de la vista, aunque los directores no se lo pidan.

En la película Requiem for a Dream de 2000, Leto adelgazó casi 30 libras para meterse en el personaje de un toxicómano, lo cual le significó todo un reto, considerando que ya de por sí es un hombre delgado, pues su peso normal es de unas 147 libras. El resultado: mareos y leves alucinaciones por falta de alimentación durante el rodaje.

En 2005, durante la presentación de su disco A Beautiful Lie con su banda de rock alternativo 30 Seconds to Mars, en la que es vocalista, Leto ya tenía unas cuantas libras de más, pues estaba en pleno proceso de preparación para encarnar a su siguiente y más polémico personaje en el cine.

En enero de 2006 ya estaba listo y filmando. Había engordado más de 66 libras para interpretar a Mark David Chapman, el asesino de John Lennon, en la cinta Chapter 27. Se dice que se preparó durante meses cenando una pizza familiar y helado de chocolate, pues estaba convencido de que siendo lo más parecido físicamente al criminal, podría entender mejor su mentalidad.

Leto declaró que es “absolutamente espantoso” lo que le hizo a su cuerpo, pues además de que ingería comida chatarra para lograr encajar en el papel, él es vegetariano. De hecho, subir tanto de peso le ocasionó severos problemas en sus pies y articulaciones, así como un leve problema de gota que ya es permanente.

En 2013 vendría un nuevo reto actoral, y físico, en la cinta Dallas Buyers Club. Se dice que Leto bajó casi 44 libras para verse prácticamente en los huesos y lucir como un enfermo en fase terminal.

Logró bajar de peso comiendo lo menos posible y prácticamente sobreviviendo a base de agua, aunque reconoce que sufrió debilitamiento al hablar y moverse. Sin embargo, todo su esfuerzo valió la pena, pues por su papel en esta cinta ganó 45 premios como mejor actor de reparto, entre ellos el Oscar y el Golden Globe.

Para interpretar al Guasón en la cinta Suicide Squad de 2016, tuvo que someterse a un exigente regimen alimenticio, comiendo cada dos horas y realizando una fuerte actividad física que le dio el tono y la masa muscular, que requería el villano de DC Comics.

El actor de 46 años entró en tal sintonía con su personaje que sus compañeros de reparto cuentan que recibían de él regalos escalofriantes, muy al estilo del desquiciado humor del Guasón.

En la reciente película Blade Runner 2049 Leto hizo un cambio que pocos percibieron: se privó del sentido de la vista. Para interpretar lo más apegado a la realidad posible a un invidente, cubrió su vista con lentes de contacto opacos. Verlo caminar lentamente sumergido en su papel, hizo llorar al propio director de la cinta, Denis Villenueve: “Era como un momento sagrado”, dijo.